Suelos muy fáciles de limpiar gracias a que se trata de un hormigón pulido con poro cerrado. Requieren solo de fregado manual o mecánico con un detergente con PH adecuado. Soportan muy bien el tráfico rodado, derrames y tránsito de personas.
Suelos muy fáciles de limpiar gracias a que se trata de un hormigón pulido con poro cerrado. Requieren solo de fregado manual o mecánico con un detergente con PH adecuado. Soportan muy bien el tráfico rodado, derrames y tránsito de personas.
Son suelos muy resistentes al impacto y a la abrasión gracias al proceso de pulido mediante herramienta diamantada que finaliza con un hormigón pulido. Esto en conjunción con el tratamiento químico permite obtener unos resultados sorprendentes.
El brillo que ofrece el hormigón pulido contribuye a aumentar la reflectividad de la luz hasta en un 30%, lo que significa un ahorro sustancial en el gasto energético derivado de la iluminación de las instalaciones.
El cierre del poro y la densificación de la superficie dificultan la penetración de la suciedad en el pavimento, que además mejora de imagen por ser un hormigón pulido.
La garantía antipolvo de nuestros productos es de 10 años tanto del producto como del aplicador, gracias tanto al proceso químico interno que se produce como al trabajo mecánico que se realiza de hormigón pulido.